16 de julio de 2015

#6INLIJULY - Heima es hogar en islandés (Laia Soler)

Ficha técnica
 Heima es hogar en islandés

Título original: Heima es hogar en islandés.

Autora: Laia Soler

Editorial: Plataforma Neo

Nº de Páginas: 360

Precio: 15,90€

Saga: x

ISBN: 978-84-16256-42-6



 Sinopsis
¿Puede estar tu hogar a miles de kilómetros de casa? Ver la vida en blanco y negro no es divertido. Laura padece una extraña enfermedad que le impide apreciar los colores, pero si últimamente su vida es gris no es solo porque sufre acromatopsia. Acaba de romper con su novio y sus padres no dejan de pelearse tras el divorcio. Por eso, decide alejarse de todo y toma el primer avión que sale del aeropuerto. El destino la lleva hasta Reikiavik, Islandia. Allí conoce al simpático Orri, quien le propone emprender un viaje para recorrer el país con él y su no tan simpático amigo Guðjon. Quizá no sea una idea sensata, pero no es que Islandia ofrezca muchas opciones a una chica que se ha escapado de casa. Lo que Laura nunca podría sospechar es que los dos islandeses esconden un secreto imposible de creer, incluso para alguien como ella, y que ese viaje la cambiará para siempre.


Opinión personal
Primero,

Con su acromatopsia, su percepción de lo especial y unas ganas de desconectar de todo; Laura ha hecho las maletas y se ha subido a un avión en dirección a Reikiavik, Islandia.

Laura es un personaje a todas luces caprichoso y cabezota (se de muchos a los que les costaba congeniar con su persona), pero personalmente yo me hice pronto con su forma de ser.
Ella evoluciona conforme pasamos página tras página, se vuelve más abierta y confiada, la entiendes, la aprecias, le coges un cariño que para qué más.
(Aunque claro, con unos islandeses así como compañeros de viaje cualquiera se abriría.)

Con ella conocemos a Orri y Guðjon, que serán los que nos muestren un universo maravilloso (más allá de la propia metáfora en sí):
Orri, un amor de chico, es el personaje más carismático. Transpira alegría por cada poro de su piel y es el perfecto seductor (o un intento de algo parecido). Un guía como no hay, ni habrá, otro; y es que decidme ¿quién se empolla guías turísticas en su tiempo libre por una turista atolondrada? Orri, claro está. Sinceramente, no se me ocurre un adjetivo calificativo lo suficientemente bueno para transmitir la simpatía que me producía este personaje.

Por otro lado tenemos al misterioso Guðjon, habla poco y es esquivo con la recién acogida por su amigo; un comportamiento de lo más normal si tenemos en cuenta que le han plantado a una desconocida en su coche y se van a recorrer juntos la bonita Islandia. Al principio su participación en la historia y su personalidad me resultaban pesadas y aburridas, pero claro está que no tienes que juzgar a nadie antes de conocer más sobre él. Porque cuando lo conoces, todo cobra sentido y sobre todo cuando se acerca la recta final.

Y no, pese a lo que se pueda pensar al principio, no hay un triángulo amoroso (cosa que agradezco, porque a mi esas situaciones me ponen de los nervios). ¡Yajú!
Y aunque las primeras impresiones son las de un típico Road-Trip llega un momento en la lectura en el que todo da un giro de 360º, pasando de una lectura realista, normalita, a fantástica. Y recuerdo, que yo me quede en plan:
“Espera, espera, espera. ¿Qué acaba de pasar aquí?”
Y cogí el libro con más ganas, dispuesta a devorarlo ese mismo día.
Laia Soler sí que sabe cómo jugar con nuestras expectativas.

Aunque todo pueda parecer apresurado por el corto periodo de tiempo que pasan juntos lo personajes y en el que surge tanta magia (y tanto drama), considero que todo está muy bien equilibrado y no faltaron días por el simple hecho de que sí hubiese añadido unas semanas más el impacto no habría sido igual.

El final, ay el final, no es que llorara; es que llene botellas de dos en dos con las lágrimas que me corrían por las mejillas.
Es una mezcla entre tristeza,  belleza y una especie de nuevo comienzo épico y maravilloso.

No dijo nada más. No hacía falta. Yo había entendido lo implícito de su pregunta y él, lo implícito de mi respuesta. Me gustaban nuestros silencios, porque decían más que cualquier palabra.


Único y original.
Un libro ligero.
Un giro de 360º en la historia.
Evolución de los personajes.
Bien desarrollado.
Llorarás.



Pd: La edición del libro es espectacular. Las imágenes en blanco y negro le dan al libro un puntazo único.


Dato importante: conocí a Laia Soler en su firma de Heima es hogar en islandés, en Valencia el pasado 16 de Mayo en La Casa de Libro.
Y, he de decir que, ¡esta autora es puro amor!

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